Existen múltiples leyendas de distintas culturas, especialmente europeas que intentan explicar el origen de las hadas. Una de estas leyendas relatada en Islandia señala que una vez, Eva se encontraba bañando a sus hijos a orillas de un río cuando Diós le habló. Eva ocultó a los niños que aún no había bañado para que el Creador no los viera pero cómo Él todo lo ve, preguntó sí con ella se encontraban todos sus hijos y Eva, mintiendo dijo que sí, a lo que Diós respondió: "aquéllos hijos que has ocultado quedaran ocultos para siempre a los ojos del hombre", convirtiéndolos en hadas ó Elfos.
Otra leyenda perteneciente a la mitología escandinava cuenta cómo los gusanos que salían del cadáver del gigante Ymir se transformaban en elfinas, criaturas bondadosas y felices que viven en el aire y los elfos oscuros, que viven en regiones subterráneas son malignos y atizonados.
Otra de las tantas leyendas relata que las hadas son ángeles caídos ó paganos muertos que no son lo suficientemente buenos como para ir al cielo ni lo bastante malos para ir al infierno, obligados a vivir eternamente en una especie de "reino intermedio". Sin embargo, esta creencia provienen de la llegada del cristianismo y se le ha considerado poco fidedigna ya que el mundo de las hadas es muy antiguo y precede en muchos milenios a la cristiandad, existiendo su creencia en diversas formas y países en todo el planeta.
Según otros autores, los Tuatha de Danann o Daoine Ide, el pueblo mítico de Irlanda, una vez derrotados ante los Fir Bolg se fueron a vivir bajo las colinas transformándose en hadas "buena gente" o "buenos vecinos". La tradición dice que siempre debe dejarse un tazón de agua limpia y clara en lugares que ellas frecuenten. No les gusta la gente quejumbrosa ni refunfuñona, les encantan los enamorados y castigan a las "doncellas avaras con sus favores amorosos".
ResponderEliminarLes incomoda mucho la falta de generosidad, rudeza, egoísmo, el ánimo sombrío, pero les encantan los lugares limpios y ordenados, las danzas, la alegría.
Según Lewis Carroll, así es como de debe ver un hada: "en primer lugar debe ser un día de calor. Se puede estar somnoliento, pero no demasiado, porque se deben tener los ojos bien abiertos. Y como dicen es Escocia: sentirse un poco hádicos. Los grillos no deben oírse. Se ven a las horas del crepúsculo, o a medianoche. Se les debe mirar fijamente, sin pestañear. Un hada sola puede ser vista entre dos parpadeos. El lugar debe estar bien barrido y el fuego calmo."